La Guardia Civil desvela que los Mossos espiaron y grabaron a altos cargos de Ciudadanos
Los Mossos grabaron conversaciones de alto cargos del partido que hoy encabeza el bloque constitucionalista en Cataluña: Ciudadanos. En concreto, una de las conversaciones sobre las que han aparecido reseñas en la documentación incautada por la Guardia Civil a la policía autonómica comandada en esas fechas por el mayor Josep Lluís Trapero se refiere a una charla mantenida por uno de los secretarios de la Mesa del Consejo General de Ciudadanos con un miembro de la Policía Nacional.
La información a la que ha tenido acceso la Benemérita sigue engordando las instancias judiciales. Dentro de los documentos entregados a los jueces figura un “extracto de conversación” mantenida por un destacado miembro de Ciudadanos el día 23 de mayo de 2017, meses antes del registro judicial al Departamento de Economía del 20 de septiembre, y del golpe de Estado separatista con referéndum ilegal incluido del 1-O. Es decir en la fase de máxima tensión de los golpistas y cuando se estaban cerrando los detalles de los sistemas ilegales de votación y de la creación de las “estructuras de país», como los golpistas les llamaban. La persona grabada era uno de los miembros destacados de la Mesa del Consejo General del partido de Albert Rivera. Uno de los nombres es el de David Heredia, pero no es el único.
Escoltas de PP y C’s en Cataluña actuaron como espías
La Guardia Civil investiga en estos momentos si la grabación ha sido un hecho asilado o, por el contrario, puede ser una más dentro de un seguimiento a miembros políticos destacados y constitucionalistas de cara a buscar información que pudieran utilizar los separatistas para desacreditar a estas formaciones o para contrarrestar sus estrategias.
Las sospechas de la Guardia Civil proceden de la evidencia de que los mossos que fueron puestos a disposición de los políticos constitucionalistas como servicio de escolta acabaron pasando información a los separatistas dentro de unas labores que realmente eran de espionaje político y no de escolta. Semejante trato fue dado, de hecho, a miembros de Ciudadanos y del PP.
Espionaje político
De hecho, la Guardia Civil tiene evidencias de que los seguimientos y espionajes generalizados fueron la tónica en el caso de asociaciones constitucionalistas como Sociedad Civil, donde el espionaje detectado afecta a numerosos altos cargos y donde se llevó la palma uno de los presidentes más activos, Ramon Bosch. Tal y como adelantó OKDIARIO.
Los espionajes formaron parte habitual de una estrategia de desprestigio político y de cobertura a la Generalitat. Así, la Benemérita tiene la evidencia de que ha habido grabaciones a la ex novia de Jordi Pujol hijo, Victoria Álvarez. Porque lo importante era tener controlados a todos aquellos que pudieran poner en peligro el golpe.
Fuentes policiales han confirmado seguimientos a la Policía el mismo día del 1-O; comunicaciones de los movimientos de las fuerzas y cuerpos de seguridad para frustrar sus actuaciones bajo orden judicial y tendentes a intentar frenar el referéndum ilegal; y hasta el intento de adquisición de 800 armas largas sin permiso del Ministerio del Interior para armar una unidad de los Mossos. Toda una serie de actividades que retratan un cuerpo altamente politizado y que colaboró con los propósitos del Govern separatista.
OKDIARIO se ha puesto en contacto con altos cargos de Ciudadanos que han mostrado su indignación, pero no su sorpresa porque “teníamos la sospecha desde hace tiempo de que nuestras conversaciones eran conocidas” y de que “nuestros movimientos y contactos con gente, por ejemplo de Sociedad Civil, estaban siendo controlados”.
La evidencia de estas grabaciones puede tener una consideración penal y judicial especialmente grave. Y es que, a la calificación propia de este tipo de comportamientos desde el punto de visto del Código Penal, habría que sumar la derivada de posible intromisión electoral. Y es que parte de esas conversaciones podían contener estrategias o ideas de actuación de cara a unas futuras elecciones.